martes, 15 de noviembre de 2011

¿Es suficiente el condón?

La verdad acerca de los condones es que ellos ofrecen la mejor protección para la sexualidad activa (Stone et al., 1998).


El uso del condón es la meta de la salud pública nacional
El Servicio de Salud Pública de los EEUU ha incluido un uso del condón como parte del programa Pueblo Saludable 2000 y Pueblo Saludable 2010-la promoción de la salud nacional y los objetivos de la prevención de enfermedades.
El gobierno federal piensa "aumentar por lo menos en un 50 por ciento la proporción de personas solteras, sexualmente activas, que usaron un condón en su última experiencia sexual". Otra meta será "aumentar por lo menos a un 60 por ciento la proporción de jóvenes solteras, sexualmente activas, entre las edades de 15 a 19 años, cuyo compañero usó un condón en su último coito". Para los muchachos adolescentes, el uso será más alto aún-" por lo menos en un 75 por ciento" (NCHS, 1999).
El uso más frecuente del condón puede reducir la creciente incidencia de infecciones por transmisión sexual entre los adolescentes sexualmente activos (KFF, 1998; Felman, 1979).

Los condones para controlar la natalidad
Los condones son una forma efectiva y barata de controlar la natalidad. De 100 mujeres cuyos compañeros usaron condones inconsistentemente o imperfectamente, 14 quedarán embarazadas en el primer año de uso. Solamente tres quedarán embarazadas si el condón se usa correctamente (Warner & Hatcher, 1998).
A diferencia de otras formas de control de la natalidad, los condones también son una protección contra las infecciones por transmisión sexual. Otras ventajas adicionales del condón en el control de la natalidad incluyen: bajo costo, fácil acceso, simples de desechar, efectos secundarios mínimos, y duración sexual más larga. El uso de los condones puede aumentar el placer sexual al reducir las ansiedades acerca del riesgo de una infección o de un embarazo (Warner & Hatcher, 1998).

Los condones y las infecciones por transmisión sexual
Los condones ofrecen una protección efectiva contra las más serias infecciones por transmisión sexual, al prevenir un intercambio de fluidos corporales (Cates & Stone, 1992; CDC, 1998; Stone et al., 1999). Tales fluidos-semen, descargas genitales, o secreciones infecciosas-son las rutas principales de transmisión (Stone et al., 1999).
Aunque los condones de látex no podrían prevenir completamente el contacto de piel con piel, ellos ofrecen la mejor protección posible, puesto que la mayoría de las infecciones por transmisión sexual atacan las áreas del pene cubierta por el condón (Stone et al., 1999). (A fin de ser efectivos, se debe usar los condones consistente y correctamente, ponérselo antes del contacto genital, y usarlo durante el contacto (Cates & Stone, 1998)).



Los condones y la fertilidad
Los condones pueden ayudar a proteger la fertilidad al prevenir la transmisión de infecciones por transmisión sexual que causan la infertilidad, tales como la clamidia y la gonorrea. Las mujeres cuyos compañeros usan condones corren un menor riesgo de hospitalización a causa de la enfermedad pélvica inflamatoria-una condición que causa infertilidad-que aquéllas cuyos compañeros no los usan (Kelaghan et al., 1982). Y las mujeres cuyos compañeros usan condones ofrecen un 30 por ciento menos de riesgos de infertilidad debida a una infección por transmisión sexual (Cramer et al., 1987).

Los condones y las infecciones bacteriales
Los condones ofrecen buena protección contra las infecciones bacteriales transmitidas sexualmente-clamidia, gonorrea, tricomoniasis, y sífilis (Stone et al., 1999; Judson et al., 1989). Durante la década de los 80, la clamidia genital se convirtió en la infección bacterial transmitida sexualmente más prevalente en los EEUU, y en 1996 hubo aproximadamente 3 millones de nuevos casos-esto hizo de la clamidia la infeccion que más se reportó en el país (KFF, 1998). El uso creciente del condón ayudará a reducir la incidencia de estas infecciones (Stone et al., 1999; Cates & Stone, 1992). Las metas nacionales de doblar la frecuencia del uso del condón se basan en la probada capacidad del condón de prevenir la gonorrea, la clamidia, y la infeccion del VIH (NCHS, 1999).

Los condones y las infecciones por virus
Los condones son efectivos contra las infecciones por virus, tales como VIH, hepatitis B, citomegalovirus, y el virus del herpes simplex 2, que se transmiten por el semen, los fluidos uretrales, y las llagas genitales (Judson et al., 1989; Cates & Stone, 1992).

VIH
Dadas las serias consecuencias de la infección VIH, gran parte de la investigación de la eficacia del condón se ha enfocado en la transmisión del VIH. Se reconoce que el condón es una barrera altamente efectiva contra la infección de VIH (CDC, 1998).
Los que se oponen al uso del condón, sin embargo, han manipulado los resultados de pruebas defectuosas de laboratorio para crear la duda entre el público acerca de la efectividad del condón contra el VIH. Por ejemplo, un estudio dedujo erróneamente que los condones de latex permitían el paso del virus del VIH, sin tomar en cuenta que se usó como ejemplo partículas que eran 100 millones de veces más pequeñas que las partículas del VIH que se encuentran en el semen (Stone et al., 1999). De hecho, el riesgo de la transmisión del VIH a través de un condón se reduce hasta 10,000 veces (Carey et al., 1992; Cavalieri d'Oro et al., 1994; Weller, 1993).
En un reciente estudio de parejas en las que uno de los compañeros era VIH positivo, solamente un caso de infección (2 por ciento) ocurrió entre los que permanecieron activos sexualmente y usaron condones consistentemente y de manera correcta. En contraste, la incidencia de la infección del VIH fue 14 por ciento con el uso inconstante (Deschamps et al., 1996). Un estudio similar mostró una tasa de infección del 10 por ciento sin el uso consistente del condón (de Vincenzi, 1994). Un metanálisis de 25 estudios sobre la transmisión del VIH y los condones determinó que las tasas de eficacia variaban entre el 87 y el 96 por ciento contra la infección del VIH (Dais & Weller, 1999).

El VPH y el herpes
Los condones proporcionan alguna protección contra viruses tales como el del papiloma humano (VPH o HPV, siglas en inglés) y el virus del herpes simplex (VSH o HSV, siglas en inglés), que infectan el área genital general (CDC, 1998). El Centro para el Control y la Prevención de las Enfermedades recomienda el uso del condón, como una forma de prevenir ambas infecciones (CDC, 1998). Puesto que los viruses del VPH y del herpes "mudan" más allá del área cubierta, los condones no ofrecen una protección completa como lo hacen contra otros patógenos.
Los condones, sin embargo, pueden disminuir el riesgo de una infección. Su uso estuvo directamente relacionado con un más bajo riesgo de contraer la infección del herpes entre mujeres costarricenses cuyos compañeros usaron condones (Oberle, et al., 1989). Y el no usar condones ha probado ser uno de los factores de riesgo más significativos para condiciones precancerosas relacionadas con el VPH (Wang & Lin, 1996).
A diferencia del VIH, la mayoría de las infecciones de VPH y VSH no tienen consecuencias catastróficas para la salud. En general, el HPS y el VSH no son tan peligrosos como el VIH o la clamidia, que los condones pueden prevenir más exitosamente-la infección de VIH se considera fatal, y la clamidia puede dar como resultado la infertilidad, o la incapacidad permanente (Friedman et al, 1998; Howell et al., 1998; OWH, 1997).

El VPH y el cáncer cervical
Pocas infecciones de VPH conducen al cáncer cervical. De por lo menos 70 tipos de VPH, solamente unos cuantos están relacionados con el cáncer cervical (Kiviat et al., 1999; Koutsky & Kiviat, 1999). La mayoría de las infecciones de VPH son de corta duración, y muchas mujeres aparentemente desarrollan una inmunidad a distintas infecciones de VPH. Casi una tercera parte de las mujeres se pueden recuperar de la infección en seis meses. Una infección persistente parecería ser el factor más elevado de riesgo para el cáncer cervical (Ho et al., 1998).
Las afirmaciones de los oponentes al uso de los condones con respecto al VPH son falsas y alarmistas. No se puede achacar al uso del condón por la alta prevalencia del VPH o del cáncer cervical entre las mujeres de los EEUU. Aunque los condones tal vez no eliminan el riesgo de transmitir el VPH que causa el cáncer, la CDC recomienda su uso para reducir el riesgo (CDC, 1998).

Eficacia del condón
Los condones son eficaces porque bloquean el contacto con los fluidos del cuerpo que causan el embarazo y las infecciones por transmisión sexual. La mayoría de los informes sobre el fracaso del condón son el resultado del uso inconsistente o incorrecto, no su rotura (Macaluso et al., 1999). En los EEUU, la verdadera tasa de rotura es un bajo dos por cada 100 condones (CDC, 1998). Las tasas elevadas de rotura en algunos estudios ocurren porque muchas personas mienten acerca del uso del anticonceptivo para culpar a un condón "defectuoso" por su falta de responsibilidad. Tales excesos en los reportes aumentan artificialmente las tasas de rotura (Trusselll, 1998).


Haz que dependa de TI

Clamidia: Te informamos sobre esta peligrosa ETS.

La información es tu mejor defensa.


¿Qué es la infección por clamidia?

La infección por clamidia es una enfermedad de transmisión sexual (ETS) frecuente, causada por la bacteria Chlamydia trachomatis, que puede afectar los órganos genitales de la mujer. Aunque generalmente la infección por clamidia no presenta síntomas o se manifiesta con síntomas leves, hay complicaciones graves que pueden ocurrir “en forma silenciosa” y causar daños irreversibles, como la infertilidad, antes de que la mujer se dé cuenta del problema. Esta infección también puede causar secreción del pene en un hombre infectado.

¿Qué tan común es la clamidia?

La clamidia es la enfermedad de transmisión sexual bacteriana reportada con mayor frecuencia en los Estados Unidos. En el 2009, los CDC recibieron notificación de 1,244,180 infecciones por clamidia de los 50 estados y el Distrito de Columbia. Una cantidad considerable de casos no se reporta porque la mayoría de las personas con clamidia no sabe que tiene la infección y no se hace pruebas de detección. Además, con frecuencia los pacientes solo se tratan los síntomas sin que se hagan pruebas de detección. Se calcula que todos los años se registran 2.8 millones de casos en los EE. UU. Frecuentemente, las mujeres vuelven a adquirir la infección si sus parejas sexuales no han sido tratadas.

¿Cómo se contrae la infección por clamidia?

La infección por clamidia puede ser transmitida durante relaciones sexuales vaginales, orales o anales. También se puede transmitir de madre a hijo durante el parto vaginal. Toda persona sexualmente activa puede contraer la infección por clamidia. Entre mayor número de parejas sexuales tenga la persona, mayor es el riesgo de infección. Las adolescentes y las mujeres jóvenes que son sexualmente activas están expuestas a un mayor riesgo de infección porque el cuello uterino (la entrada al útero) no se ha formado completamente y es más susceptible a infecciones. Debido a que la clamidia puede transmitirse durante las relaciones sexuales orales o anales, los hombres que tienen relaciones sexuales con hombres también están en peligro de contraer la infección clamidial.

¿Cuáles son los síntomas de la infección por clamidia?

A la infección por clamidia se le conoce como la enfermedad "silenciosa" porque la mayoría de las personas infectadas no presentan síntomas. Cuando se manifiestan, los síntomas aparecen generalmente entre 1 y 3 semanas después del contagio.
En las mujeres, la bacteria infecta inicialmente el cuello uterino y la uretra (el conducto urinario). Las mujeres con síntomas podrían presentar flujo vaginal anormal o una sensación de ardor al orinar. Algunas mujeres siguen sin tener signos ni síntomas aun cuando la infección se propague del cuello uterino a las trompas de Falopio (los conductos que transportan los óvulos desde los ovarios hasta el útero); otras mujeres presentan dolor en la parte inferior del vientre, dolor de espalda, náusea, fiebre, dolor durante las relaciones sexuales o sangrado entre los períodos menstruales. La infección clamidial del cuello uterino puede propagarse al recto.
Los hombres con signos o síntomas podrían presentar secreción del pene o una sensación de ardor al orinar; también pueden sufrir de ardor y picazón alrededor de la abertura del pene. El dolor y la inflamación de los testículos es poco frecuente.
Los hombres o mujeres que tienen relaciones sexuales con penetración anal pueden contraer la infección clamidial en el recto, lo cual puede causar dolor, secreciones o sangrado en el recto.
La infección por clamidia también puede presentarse en la garganta de las mujeres y hombres que han tenido relaciones sexuales orales con una pareja infectada.

¿Qué complicaciones puede haber si no se trata la clamidia?

Si no es tratada, la infección puede avanzar y causar graves problemas reproductivos y de salud con consecuencias a corto y largo plazo. Al igual que la enfermedad, el daño que causa la clamidia es a menudo "silencioso".
En las mujeres, si la infección no es tratada, puede propagarse al útero o a las trompas de Falopio y causar enfermedad inflamatoria pélvica (EIP). Esto ocurre en alrededor del 10 al 15 por ciento de las mujeres que tienen clamidia y no han recibido tratamiento. La clamidia también puede causar infección en las trompas de Falopio sin presentar ningún síntoma. La EIP y la infección “silenciosa” en la parte superior del aparato genital pueden causar daño permanente en las trompas de Falopio, el útero y el tejido circundante. El daño puede ocasionar dolor pélvico crónico, infertilidad o embarazo ectópico (embarazo afuera del útero) que puede resultar mortal (en inglés). La clamidia también puede aumentar la probabilidad de adquirir la infección por el VIH, si hay exposición al virus.
Para ayudar a prevenir las graves consecuencias de la infección por clamidia, se recomienda que las mujeres sexualmente activas de 25 años de edad o menos se realicen una prueba de detección de la clamidia al menos una vez al año. También se recomienda que las mujeres mayores de 25 años con factores de riesgo de contraer clamidia (por ejemplo, si tienen una nueva pareja sexual o múltiples parejas sexuales) se realicen la prueba de detección anualmente. Todas las mujeres embarazadas deben hacerse una prueba de detección de la clamidia.
Las complicaciones entre los hombres son poco comunes. En ocasiones, la infección se propaga al epidídimo (el conducto que transporta el semen desde los testículos) y causa dolor, fiebre y, rara vez, esterilidad.
En muy pocos casos, la infección clamidial genital puede causar artritis que puede estar acompañada de lesiones en la piel e inflamación de los ojos y de la uretra (síndrome de Reiter).

¿Cómo se diagnostica la infección por clamidia?

Existen pruebas de laboratorio para diagnosticar la infección por clamidia. En algunas pruebas se analiza la orina y en otras se requiere que la muestra sea obtenida de zonas como el pene o el cuello uterino.

¿Cómo se puede tratar la clamidia?

La clamidia puede ser fácilmente tratada y curada con antibióticos. Los tratamientos más frecuentes consisten en tomar una dosis única de azitromicina o doxiciclina durante una semana (dos veces al día). Las personas que son VIH positivas que tienen clamidia deben recibir el mismo tratamiento que las personas que no tienen el VIH.
A todas las parejas sexuales de la persona infectada se les debe hacer una evaluación, pruebas de detección y tratamiento, si es necesario. Las personas con clamidia deben abstenerse de tener relaciones sexuales durante 7 días después de tomar la dosis única del antibiótico o hasta finalizar el tratamiento completo de 7 días, para evitar contagiar la infección a sus parejas.
Las mujeres cuyas parejas sexuales no han recibido el tratamiento adecuado corren un alto riesgo de volverse a infectar. Tener infecciones múltiples aumenta el riesgo de que la mujer sufra graves complicaciones en su salud reproductiva, entre ellas la infertilidad. Las mujeres y los hombres con clamidia deben hacerse pruebas alrededor de tres meses después del tratamiento de la infección inicial, independientemente de que crean que su pareja sexual ha sido tratada.

¿Cómo puede prevenirse la clamidia?

La manera más segura de evitar el contagio de enfermedades de transmisión sexual es abstenerse del contacto sexual o tener una relación estable, mutuamente monógama, con una pareja a quien se le han hecho pruebas y se sabe que no está infectada.
Los condones de látex en los hombres, cuando se usan de manera habitual y correcta, pueden reducir el riesgo de transmisión de la clamidia.

Los CDC recomiendan que todas las mujeres sexualmente activas de 25 años de edad o menos y las mujeres de más edad con factores de riesgo de infecciones clamidiales (quienes tienen una nueva pareja sexual o múltiples parejas sexuales), así como todas las mujeres embarazadas se hagan anualmente pruebas para detectar esta enfermedad. El médico debería siempre hacer una evaluación de riesgos de enfermedades sexuales, la cual podría indicar la necesidad de realizar pruebas de detección con mayor frecuencia en ciertas mujeres.

Cualquier síntoma en el área genital, como por ejemplo una llaga inusual, flujo con olor, sensación de ardor al orinar o sangrado entre ciclos menstruales, podría significar que la mujer tiene una infección por una ETS. Si la mujer o el hombre tienen alguno de estos síntomas, deben dejar de tener relaciones sexuales y consultar a un médico de inmediato. El tratamiento oportuno de las enfermedades de transmisión sexual en las mujeres puede prevenir la EIP. Las mujeres y los hombres a los que se les ha informado que tienen una enfermedad de transmisión sexual y que reciben tratamiento, deben notificar a todas sus parejas sexuales recientes (con las que hayan tenido relaciones en los últimos 60 días) para que vayan al médico a examinarse para saber si tienen una ETS. No se debe reanudar la actividad sexual hasta que todas las parejas sexuales hayan sido examinadas y hayan recibido el tratamiento que necesiten.

Infórmate sobre los métodos naturales de Planificación Familiar

Aprende a conocer tu ciclo genital y así podrás evitar embarazos no deseados.

La "prueba del amor"

En pleno año 2011, casos como los presentados en éste video siguen ocurriendo debido a que las adolescentes, sobre todo, aquellas en los sectores C-D no se informan sobre las consecuencias de tener relaciones sexuales SIN el uso de ALGÚN MÉTODO ANTICONCEPTIVO.  Este comportamiento normalmente resulta en que la joven queda embarazada, y tras haber depositado toda su confianza en su "novio", quien normalmente le prometerá cualquier cosa con el fin de tener relaciones con ella, decide buscar al chico para que "se haga cargo", pero lamentablemente el chico frecuentemente se desembaraza de la situación y la chica será una madre adolescente soltera. Todo por la falta de CONSCIENTIZACIÓN sobre la importancia de métodos anticonceptivos.

No esperes a tener relaciones sexuales para buscar información y consejos sobre los métodos anticonceptivos.

Cuanto mas informado estés, mas responsable llegaras a ser. Son miles de embarazos en los jóvenes adolescentes cada año, no te sumes a esta estadística triste e innecesaria. Relación sexual significa querer o no querer tener hijos, significa decisión de dos, significa anticoncepción. La primera relación sexual es una experiencia vital que requiere una serie de condiciones previas que pocos adolescentes contemplan. Perder la virginidad no debe plantearse como un reto, ni como una huida hacia adelante para evitar el ridículo. Es imprescindible sentirse correspondido en el amor y tomarse el tiempo necesario para no realizar el acto sexual bajo presión ni con sentimientos de culpabilidad. Usar la cabeza antes de acostarse con alguien debería ser una obligación compartida por la pareja que se inicia en el acto sexual, para no correr así riesgos innecesarios: embarazos prematuros, contagio de enfermedades venéreas o grandes desilusiones. La información acerca de los métodos anticonceptivos más seguros está al alcance de todos.

domingo, 6 de noviembre de 2011

CONDONES PARA MUJERES "EL ANILLO VAGINAL"

!!!TIPOS DE METODOS PARA PREVENIR EL EMBARAZO!!!

ESTE VIDEO ES UN POCO ANTIGUO PERO ES BASTANTE SERIO PARA INFORMAR DE LOS DIVERSOS TIPOS DE ANTICONCEPTIVOS Y SU USO :)
http://www.youtube.com/watch?v=eVHuu6KtCwI

¿METODOS ANTICONCEPTIVOS?

Método anticonceptivo es aquel que impide o reduce significativamente las posibilidades de una fecundación en mujeres fértiles que mantienen relaciones sexuales de carácter heterosexual. Los métodos anticonceptivos contribuyen decisivamente en la toma de decisiones sobre el control de la natalidad (número de hijos que se desean o no tener), la prevención de embarazos, así como en la disminución del número de embarazos no deseados y embarazos en adolescentes. Los métodos que se administran después de mantener relaciones sexuales se denominan anticonceptivos de emergencia.